Las patologías cardiovasculares son una preocupación creciente en la población española. De hecho, las enfermedades del corazón ocasionan uno de cada tres fallecimientos en España, siendo la principal causa de mortandad del país. La buena noticia es que, en la mayoría de los casos, el riesgo de sufrir estos problemas se puede reducir a través de hábitos de vida saludables. Es aquí donde entre en juego el tándem que conforman aceite de girasol y salud cardiovascular.
No olvides que una dieta equilibrada es fundamental en la prevención del desarrollo de complicaciones coronarias. Así, un menú donde predominen las frutas y verduras, los pescados, los cereales integrales y las grasas insaturadas contribuye a evitar infartos, ictus o insuficiencia cardiaca. Es en este último elemento, el de las grasas insaturadas, donde se encuadran las propiedades del aceite de girasol y la salud cardiovascular. Pero, ¿por qué es bueno este alimento para tu corazón y hasta qué punto ayuda a protegerlo?
¿Qué tan bueno es el aceite de girasol para la salud?
El aceite de girasol es un tipo de aceite de semillas rico en ácidos grasos esenciales, elementos clave para el funcionamiento adecuado de nuestro organismo. Esto incluye la protección del sistema cardiovascular. En concreto, este alimento tiene un alto contenido en ácidos grasos insaturados, las denominadas “grasas buenas”, altamente son beneficiosas para el corazón.
Además, en esta relación entre aceite de girasol y salud cardiovascular, también existen otras sustancias intervinientes en el cuidado de la salud del corazón. Por ejemplo, ¿sabías que, gracias a su contenido en vitamina E, es un potente antioxidante que ayuda a proteger las células del daño? ¿O qué contiene vitamina K, la cual es necesaria para la coagulación de la sangre?
¿Cómo contribuye el aceite de girasol en la salud cardiovascular?
Como consecuencia, el aceite de girasol se convierte en el cóctel perfecto para al cuidado del corazón. Así lo respaldan numerosos estudios científicos. ¿Cómo dice exactamente la Ciencia que contribuye el aceite de girasol en la salud cardiovascular?
- Reducción del colesterol LDL: El aceite de girasol contiene ácidos grasos insaturados, como el ácido linoleico, que ayudan a reducir los niveles de colesterol LDL en la sangre. Esto disminuye el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares. Por ejemplo, según una investigación, las personas que consumen una dieta rica en aceite de girasol alto oleico durante 10 semanas presentan niveles significativamente más bajos del denominado “colesterol malo” que aquellas otras que optaron por una dieta con grasas saturadas.
- Acción antioxidante: El aceite de girasol también es rico en vitamina E, un antioxidante que protege a las células del daño causado por los radicales libres. Esta acción antioxidante ayuda a prevenir el estrés oxidativo y la inflamación, dos factores de riesgo relacionados con enfermedades cardiovasculares.
- Mejora de la circulación sanguínea: La correcta circulación de la sangre a lo largo de todo el organismo es una de las piezas clave en la salud cardiovascular. En este sentido, el consumo de aceite de girasol mejora la fluidez, gracias a la presencia de eicosanoides, lo que favorece la circulación y reduce el riesgo de coágulos sanguíneos que pueden dar lugar a un colapso.
- Regulación de la presión arterial: Por último, también hay estudios que demuestran que el consumo moderado de aceite de girasol ayuda a regular la presión arterial. Y, como bien sabes, la hipertensión es un gran enemigo de tu corazón.
En definitiva, existe una relación importante entre el consumo de aceite de girasol en la salud cardiovascular, lo convierten en una opción saludable dentro de una dieta equilibrada. ¿Quieres mantener el riesgo de enfermedades cardiacas a raya? Ten a mano Coosol, el aceite de girasol de siempre con la excepcional calidad que se demanda ahora.
