El aceite de girasol es un básico de nuestra cocina. De hecho, según el Informe Anual de Consumo Alimentario en España 2024, el consumo per cápita de este producto se sitúa en la actualidad en 3,46 litros al año. Su versatilidad, su precio y sus propiedades saludables son los motivos que esconde esta preferencia de los consumidores. Ahora bien, ¿sabes qué contiene cada cucharada? Descubre cuál es el perfil nutricional del aceite de girasol y cómo puede marcar la diferencia en tu salud.
¿Cuál es el perfil nutricional del aceite de girasol?
Cuando hablamos de perfil nutricional del aceite de girasol, nos referimos al conjunto de compuestos que presenta este producto y a cómo influyen en el organismo. En este sentido, debes saber que su base son los ácidos grasos, ya que constituyen prácticamente el 100 % de su composición. Eso sí, no todos ni en la misma cantidad.
De estos, destaca la proporción de grasas poliinsaturadas sobre las saturadas, especialmente el ácido linoleico (omega 6), un factor clave para mantener la salud cardiovascular. Como consecuencia, su consumo moderado se asocia con la mejora del perfil lipídico, la regulación de la inflamación y la reducción del colesterol LDL en sangre (el llamado colesterol “malo”).
Otro elemento ‘estrella’ del perfil nutricional del aceite de girasol es su alta dosis de vitamina E. Se trata de un antioxidante que combate los radicales libres y cuida la piel desde dentro. ¿Sabías que 100 gramos de este aceite aportan más del 270% del valor diario recomendado de esta vitamina por los organismos oficiales? Esta propiedad lo convierte en un aliado para la piel, la vista y el sistema inmunológico. No es casualidad que muchos cosméticos naturales lo incluyan entre sus ingredientes.
Por último, no podemos olvidar que existen diferentes tipos de aceite de girasol: el refinado, el prensado en frío o el alto oleico. Este último, gracias a su mayor proporción de ácido oleico, te ofrece la posibilidad de disfrutar de un mayor equilibrio entre omega 3 y omega 6. Si buscas una opción más estable para cocinar a altas temperaturas y con un valor nutricional supremo, el alto oleico puede ser tu mejor elección.
¿Cuáles son los valores nutricionales del aceite de girasol?
Ahora bien, beneficios generales aparte, ¿de qué se compone exactamente este producto? En este sentido, según la Fundación Española de la Nutrición (FEN), este es el perfil nutricional del aceite de girasol.
Componente | Cantidad por 100 g | Cantidad por 10 g (cucharada) | |
Energía | 899 kcal | 90 | |
Grasas totales | 99,9 g | 10 g | |
Grasas saturadas | 12,3 g | 1,23 g | |
Grasas monoinsaturadas | 25,15 g | 2,52 g | |
Grasas poliinsaturadas | 62,3 g | 6,23 g | |
Omega 6 (ácido linoleico) | 62,21 g | 6,22 g | |
Omega 3 | 0,061 g | 0,006 g | |
Vitamina E | 49,2 mg | 4,9 mg | |
Agua | 0,1 mg | 0 g | |
Fuente: Tabla nutricional de la FEN
Estas son las sustancias con presencia en el perfil nutricional del aceite de girasol. ¿Y nada más? Si te preguntas si este aceite tiene hidratos de carbono, fibra, proteínas, minerales u otras vitaminas, la respuesta es no. ¿Y qué pasa con el colesterol? El aceite de girasol tampoco contiene colesterol.
Como ves, el perfil nutricional del aceite de girasol representa una fuente pura de lípidos y vitamina E. ¿Quieres beneficiarte de este coctel de ácidos grasos esenciales, antioxidantes y vitaminas? En Coosol te ofrecemos un amplio catálogo de aceites de girasol con un denominador común: la garantía de calidad que sólo puede ofrecer la marca de referencia del mercado. ¡Pruébalos!