Disfruta de una deliciosa coliflor rebozada, crujiente y llena de sabor
¿Te apetece un plato sencillo, pero lleno de sabor? La coliflor rebozada es una opción perfecta para disfrutar de una verdura versátil con un toque crujiente que enamora a todos. Este plato no solo es fácil de preparar, sino que también es ideal para servir como entrante, acompañamiento o incluso como snack saludable.
El secreto de una coliflor rebozada perfecta está en su empanado. Para conseguir esa textura dorada y crujiente, puedes experimentar con diferentes tipos de rebozados. Si quieres descubrir opciones creativas, no te pierdas nuestro artículo sobre los 6 tipos diferentes de empanados o rebozados para frituras, donde te damos ideas para personalizar tus platos.
Además, la coliflor rebozada es una excelente manera de incorporar verduras a tu dieta de forma divertida y apetitosa. Su sabor suave combina perfectamente con especias, hierbas aromáticas o incluso un toque de queso parmesano en el rebozado. ¡Una receta que te sorprenderá por su sencillez y su resultado espectacular!
¡No te lo pierdas y descubre una nueva forma de disfrutar esta verdura!
Tip extra: Pre-cocción de la coliflor
Para asegurarte de que la coliflor quede tierna por dentro sin perder su crujiente rebozado, te recomendamos blanquearla antes de empanarla. Sumerge los ramilletes de coliflor en agua hirviendo con una pizca de sal durante 2-3 minutos, luego escúrrelos y pásalos por agua fría para detener la cocción. Este paso no solo suaviza la coliflor, sino que también ayuda a que el rebozado se adhiera mejor.
Curiosidad: Orígenes del rebozado
¿Sabías que la técnica de rebozar alimentos tiene sus raíces en la cocina japonesa? La Tempura, un estilo de rebozado ligero y crujiente, fue introducido en Japón por misioneros portugueses en el siglo XVI. Desde entonces, se ha popularizado en todo el mundo, adaptándose a diferentes ingredientes, como la coliflor. ¡Incluso puedes inspirarte en esta técnica para darle un toque único a tu receta!
Incluir estos detalles en tu receta no solo la hará más interesante, sino que también brindará a tus lectores herramientas y conocimientos para mejorar sus habilidades en la cocina. ¡Buen provecho! 🥦🍴
150 Kcal
4 comensales
25 minutos
Ingredientes
Realización
Comienza por limpiar la coliflor, retirando las hojas y cortándola en floretes de tamaño similar. Es crucial que los floretes no sean demasiado grandes para asegurar una cocción uniforme. Lava los floretes bajo agua fría y sécalos bien.
En un bol grande, mezcla la harina con un poco de sal y pimienta. Añade los huevos y comienza a batir mientras incorporas gradualmente la leche hasta obtener una mezcla homogénea y sin grumos. La consistencia debe ser similar a la de una masa para panqueques, ni muy líquida ni demasiado espesa.
Calienta el aceite de girasol Coosol en una sartén profunda. Mientras se calienta el aceite, pasa cada florete por la mezcla de rebozado, asegurándote de que queden bien cubiertos. Es importante que el aceite esté bien caliente antes de comenzar a freír para evitar que la coliflor absorba demasiado aceite y se vuelva grasosa.
Con cuidado, coloca los floretes rebozados en el aceite caliente. Fríe hasta que estén dorados y crujientes, lo cual debería tomar unos 4 minutos por lado. Es aconsejable no sobrecargar la sartén para mantener la temperatura del aceite y asegurar una cocción uniforme.
Una vez dorada la coliflor, retírala del aceite y déjala escurrir en papel absorbente para eliminar el exceso de grasa. Sirve caliente, idealmente acompañada de una salsa tártara o una simple mezcla de yogur con hierbas para agregar un toque fresco al plato.