Celebra el Carnaval al estilo más dulce con las clásicas Orejas de Carnaval, un postre tradicional que evoca recuerdos y sabores de festividad. Estas delicias crujientes, con su forma irregular que recuerda a una oreja, son un imprescindible en estas fechas llenas de color y alegría. Con una masa simple, pero exquisita, fritas a la perfección y espolvoreadas con azúcar, son el capricho ideal para compartir con familia y amigos. Y para que tu experiencia en la cocina sea aún más placentera, no te pierdas nuestra colección de trucos de cocina que harán de la preparación algo tan divertido como la celebración misma.
Consejos para Unas Orejas de Carnaval Inolvidables
Antes de comenzar a amasar y freír, toma nota de estos trucos que te ayudarán a conseguir unas Orejas de Carnaval doradas y crujientes:
- Amasado óptimo: Dedica tiempo a amasar bien la masa hasta que esté suave y elástica, lo que facilitará el estirado posterior.
- Finura de la masa: Extiende la masa lo más finamente posible para lograr esa textura crujiente característica al freír.
- Temperatura del aceite: Calienta el aceite a la temperatura adecuada antes de freír las orejas. Un aceite demasiado frío las hará aceitosas y uno demasiado caliente quemará el exterior antes de cocer el interior.
- Espolvorea con arte: Una vez fritas, espolvorea las orejas con azúcar mientras aún están calientes, para que se adhiera bien y les dé ese toque dulce final.
- Paciencia: No amontones las orejas al freír; dale a cada una el espacio y el tiempo necesario para que se cocinen de manera uniforme.
Equipado con estos consejos, estás a un paso de disfrutar de uno de los dulces más emblemáticos del Carnaval. ¡Manos a la obra y a disfrutar de la fiesta con sabor casero!
350 Kcal
6 comensales
45 minutos
Ingredientes
Realización
En un recipiente grande, tamiza la harina junto con una pizca de sal. Añade el azúcar y la ralladura de limón, mezclando uniformemente para distribuir los sabores.
Haz un hueco en el centro de los ingredientes secos y añade los huevos, la leche, y el aceite de girasol Coosol. Mezcla con una cuchara de madera hasta obtener una masa homogénea. Si es necesario, ajusta la textura añadiendo un poco más de harina o leche, según se requiera.
Una vez que la masa tenga una textura suave y no se pegue a las manos, cúbrela con un paño de cocina y deja que repose durante al menos 20 minutos. Esto permite que el gluten se relaje, facilitando el estirado posterior.
Estira la masa en una superficie ligeramente enharinada hasta que quede muy fina, casi transparente. Utiliza un cortador de pizza o un cuchillo afilado para cortar la masa en formas de orejas o tiras largas.
Calienta el aceite de girasol Coosol en una sartén grande. Cuando esté bien caliente, fríe las orejas de carnaval hasta que estén doradas y crujientes, aproximadamente 1-2 minutos por lado. Es importante no sobrecargar la sartén para mantener una temperatura constante del aceite
Retira las orejas de carnaval del aceite y escúrrelas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa. Espolvorea generosamente con azúcar glas mientras aún están calientes.